Green Lantern y la evolución del 3D

Antes de nada quería comentaros que el título que tenía pensado para este artículo iba a ser «3D Sucks«, pero no quería ser tan radical, y además he empezado a replantearme algunos aspectos de esta tecnología, así que he preferido un título más comercial y políticamente correcto.

Efectivamente, hoy he ido a ver «Linterna Verde» en 3D, pero mi alma de cinéfilo y crítico empedernido me obliga a hablar un poco de la película antes de ponerme a analizar más detalladamente la evolución del 3D hasta hoy.

A pesar de las malas críticas que le están dando a mi no me ha disgustado, como sí hicieron otros títulos de superhéroes, véase «Iron Man«, «Hulk«, «Daredevil«… En fin, la lista es larga. Pero esta película al menos es entretenida, y diferente, ya que sigue una estructura argumental bastante atípica y que va por libre.

El 3D

Desde que se proyectó en los cines la decepcionante Avatar de James Cameron, ha pasado más o menos medio año. Recuerdo que fui a verla con la ilusión de un niño, había una expectación general entorno a ella como nunca antes había visto, «Revolucionará el mundo del cine», «Habrá un antes y un después» «El 3D es totalmente increíble y novedoso» decían, y yo que me lo creí. Pero a la hora de ver la película la realidad fue otra, decepción, decepción total.

Con un argumento más que trillado, y que, como habréis podido oír infinidad de veces, parecía sacado de Pocahontas, poca profundidad a la hora de ilustrar un mundo como Pandora, que podría haber dado muchísimo juego, unos personajes con una personalidad más que repetida, y sobretodo ese 3D paupérrimo, el cual, a parte de ver pasar astillas de madera a toda velocidad con más claridad, no me aportó absolutamente nada. Y ahí es donde quería llegar, el 3D.